Hace más de tres meses que Anne Igartiburu y Manuel Bandera, la
extraña pareja, se subieron al reloj de la Puerta del Sol y dijeron eso tan
bonito, original y soso de “¡Feliz 2010!”
En cualquier otra ocasión,
después de esa frase tan linda, en TVE habría aparecido el primer anuncio del
nuevo año, uno de los más caros de la temporada (porque el más caro es el
último, creo). Pero eso no pasó. No hubo primer anuncio, sino una promo de TVE
que prestaba una especial atención a
Águila roja.
Porque el 1 de enero de 2010,
después de 53 años, TVE retiró la publicidad. En principio, esto beneficiaría a
las televisiones privadas, que fueron quienes sugirieron que el ente público no
debía financiarse de semejante manera, porque les quitaba parte del pastel
publicitario y no era normal que la televisión estatal entrara en estas guerras
de tarifas y de audiencias. Y sorprendentemente, TVE dijo “venga, vale, pues nosotros sin anuncios”.
Parecía un suicidio. No hay
anuncios, no hay pasta. No hay anuncios, hay más horas que rellenar, así que o
alargamos los programas o los hacemos más baratos o tiramos de archivo. No hay
anuncios, luego los contenidos serán un coñazo y la gente verá otras cadenas.
Pero en realidad, no pasaba
nada. Primero, porque bueno, si el ente es público pues que nos ponga
documentales, informativos y cine español. Aunque no los vea ni Dios da igual,
es un ente público y como no tiene anuncios no va a pelear por la audiencia.
Segundo, porque las televisiones privadas, que se supone que iban a pellizcar
más pasta de la tarta publicitaria, han bajado sus audiencias con respecto a
diciembre de 2009 porque han subido las temáticas de la TDT (las fachas y las
otras) y las de pago (Fox, AXN, CANAL+ y cia). ¿Por qué? Porque la programación
de las privadas sigue siendo una castaña pilonga así de grande. Y tercero,
porque en los tres meses que lleva TVE sin anuncios, el efecto ha sido justo el
contrario.
Aquí hacemos una pausa e
imaginamos una promo de Águila
roja.
Bueno, el caso es que desde
que TVE quitó los anuncios, es más líder. Empezó enero con un subidón
acojonante, y pasó del 16,6% al 18,6%. O sea, 2 puntos en un mes, lo que en el
mundo de la televisión denominamos técnicamente como “un güevo”. En febrero
bajó al 17,7%, pero de los 50 programas más vistos ¡¡¡47!!! fueron de TVE1. Y
en marzo bajó otro poco más, al 16,6%, pero siguió siendo la cadena más vista.
O sea, que ahora mismo está como en diciembre, pero con la salvedad de que
Telecinco y Antena 3 también han bajado durante estos tres meses.
Hay quien dice que este
subidón se debe a que a la gente le mola ver la tele sin publicidad. Puede ser,
pero no es exactamente por eso. O sea, sí que mola ver la tele sin anuncios, yo
de hecho hace muchos años que me niego a ver una película con publi: o la
veo en CANAL+, o en DVD, o la grabo en mi VHS supermoderno y paso los anuncios
en fufú (así pronuncio yo de toda la vida la tecla de FFWD). Y también es
verdad que puestos a ver un telediario, sabes que el de TVE no lo van a cortar
con publicidad. Pero hay algo más, y es que de momento, TVE ha mantenido los
programas que la hicieron líder en 2009: la Champions,
La hora de José Mota,
Españoles en el mundo, las
motos, Águila roja…
Aprovechamos y hacemos otra
pausa y colocamos aquí otra promo de Águila
roja.
Y como TVE mantiene esos
programas, pero encima sin anuncios, pues la gente no hace zapping y no se
puede fugar el porcentaje de espectadores que cambian de canal cuando salen los
anuncios. Y la audiencia sube. Y todo es perfecto. Sí, pero…
- La Champions
es muy cara y en breve TVE no podrá pagarla.
- Telecinco ya ha comprado los derechos de las motos.
- Lo mismo sucederá con Águila
roja y con otras series de ese tipo: Globomedia encontrará un
mejor postor y le venderá la serie (como ya ha pasado, por ejemplo, con Mira quién baila, que
daba unos resultados de audiencia muy buenos pero salía muy caro).
- José Mota se quemará algún día, digo yo.
Y así, poco a poco, TVE irá
perdiendo su liderazgo. Pero ojo, no lo hará de una manera contundente, porque
Telecinco, Antena 3, Cuatro y La Sexta seguirán guerreando por la audiencia
para conseguir más publicidad, y se copiarán los formatos las unas a las otras,
y harán late nights absurdos para competir con otros late nights, y harán
programas de chistes absurdos para competir con otros programas de chistes más
absurdos aún. Y las TDTs (las fachas y las otras) subirán su audiencia, y las
de pago (Fox, AXN, CANAL+ y cia), también las subirán, y la audiencia estará
muy repartida, y se notará muy poco que TVE deja de ser líder.
Y al final no será tan malo
eso de no tener publicidad.
A todo esto, Telecinco es la segunda
cadena más vista. Ha bajado un poco, pero ha acortado distancias con TVE. Y a
todo esto, Antena 3
está en sus niveles más bajos desde 1992, cuando se empezaron a medir las
audiencias. Como se descuide, va a llegar a los niveles de 1989, cuando todavía
no existía.
Pero para mí, lo peor de que
TVE deje de emitir publicidad es que ya no podremos volver a ver anuncios como
los que os he ido colocando a lo largo de este post. Y no me refiero ahora a
las promos de Águila
roja.