martes, 8 de septiembre de 2009

Venecia sin mí (Crónica ausente de un Festival, II)

Continúa el Festival de Venecia y yo continúo en Madrid, ajeno a lo que sucede en el Lido, tumbado en mi hamaca de lona fucsia y degustando con fruición un zumo de pera fresco. Entonces recibo una llamada telefónica de un amigo que sí que está en Venecia y que me cuenta cosas. Como no puedo decir su nombre porque nos da risa a los dos y porque trabaja para otro medio, le pondremos un nombre en clave: Carlos Martín del Prado.
- Hola, tío.
- Hola, Carlos Martín del Prado.
- Qué fuerte tío, tienes que ver la película de Daniel Monzón, es superfuerte tío, tenían que haberla seleccionado para la sección oficial.
- Pero si las películas de Daniel Monzón son un churrillo, Carlos, acuérdate de El robo más grande jamás contado o de La caja Kovak
- Que ésta es buena, tío, que Luis Tosar se va a llevar el Goya seguro, y quién sabe si el Oscar, tú espérate tío.
Me esperaré, pero Carlos Martín del Prado suele ser exagerado y no creo que Luis Tosar gane un Oscar. Hablamos de Celda 211, una de las tres películas españolas (bueno, cuatro, porque Pere Portabella ha presentado también un documental) que están en Venecia fuera de concurso. Cuenta una rebelión en la cárcel y, en efecto, en todas partes estoy leyendo que Luis Tosar, en el papel de Malamadre, líder de la revuelta, ha hecho el mejor papel de su vida. Creámoslo.
Celda 211. Dicen que Luis Tosar está chachi.
- ¿Y qué tal Gordos, Carlos Martín del Prado?

- Más floja, tío, más floja. No sé, ya me dirás, tú vas a verla el martes, ¿no?
- Sí, tío.
Yo normalmente no digo “tío”, pero Carlos Martín del Prado me pega las muletillas. Y sí, efectivamente, aún no he oído grandes elogios para Gordos.
- Tío, el que está superplasta es Werner Herzog, tío.
- Andá, ése es el de Nosferatu con Klaus Kinski, ¿no?
- ¿Y eso a qué viene? Claro que es ése, tío, ¿estás tonto?
- No, Carlos Martín del Prado, te lo pregunto por si algún lector no lo sabe.
- Pues ha hecho un remake del Teniente corrupto de Abel Ferrara, la de Harvey Keitel.
- Molaba esa peli…
- Claro, entonces ¿para qué la hace otra vez? Además con Nicolas Cage y con Eva Mendes
Eva Mendes. La he entrevistado dos veces y cada vez que mencionan su nombre mi corazón late más deprisa y bombea más sangre, pero no os digo hacia dónde.
Eva Mendes y Nicolas Cage. Que Dios me perdone, pero me veo obligado a repetir en un pie de foto que el de la derecha me importa un pepinete.
- ¿Y qué tal está Eva Mendes?

- Como un queso, tío.
- Digo como actriz.
- Ah. Pues normal. Igual que Nicolas Cage. Normales. Pero es que luego nos han puesto otra película de Herzog por sorpresa, que se llamaba My son, my son, what have ye done.
- Andá, en verso, cómo mola.
- Sí, pero trata de un tío que mata a su madre y se atrinchera con dos flamencos como rehenes.
- ¿Dos flamencos tipo Camarón y Chiquito de la Calzada?
- No, dos flamencos tipo pájaros rosas de ésos que levantan una pata.
- Huy qué raro.
- Sí. Y además hay un documental y un corto por ahí también de Herzog.
- Qué fijación…
- ¿Por Herzog?
- No, por Eva Mendes.
Michael Moore y señora. Oronda pareja.
Leo en prensa que en este Festival ha cobrado portagonismo Berlusconi, Hugo Chávez, el capitalismo… ¿pero qué diablos es esto, Carlos Martín del Prado?

- Es que Oliver Stone ha hecho un documental sobre Hugo Chávez.
- Ya son ganas.
- Bueno, pero Oliver Stone ha hecho documentales sobre Fidel y quiere hacer uno sobre Mahmud Ahmadineyad.
- Extraños gustos políticos.
- Pues no te lo pierdas, que ayer le dijo al corresponsal de El País que transmitiera en nuestro país que el Rey de España debería callarse.
- Oh, Dios mío, otra vez con ésas…
- Ya. ¿Y lo de Michael Moore? ¿Qué me dices de lo de Michael Moore, Jose? Qué fuerte, tío, qué fuerte.
- ¿El qué de Michael Moore? ¿Lo de que sigue estando tan rellenito?
- No, lo de que ha hecho una película criticando el capitalismo, y mientras tanto sus agentes están pidiendo dinero a los medios que quieren entrevistarle.
- Qué fuerte, tío.
- Sí, qué fuerte.
- Pero es que a mí no te creas que Michael Moore me vuelve loco. Échale si no un vistazo al post que escribí sobre Sicko, Carlos Martín del Prado …
- Es que estoy en Venecia y ahora mismo no me sale de los güevos, Jose.
Cómo es Carlos Martín del Prado de drástico. Pero tengo que cuidarle y tragar cone estas salidas de tono, porque a lo mejor me tiene que contar más cosas del Festival.