lunes, 22 de diciembre de 2008

Los Goya: me gusta / no me gusta

Hace 17 años, Jean Pierre Jeunet, uno de los directores de Delicatessen, rodó un corto que se exhibía precisamente antes de Delicatessen: Foutaises (en España, Tonterías). En él, Dominique Pinon, uno de los tíos con la cara más extraña que he visto en mi vida junto con Joe Rígoli, enumeraba cosas que le gustaban y cosas que no. Así de sencillo y así de genial. No viene mucho a cuento, pero yo ahora voy y os casco el corto, ni ídem ni perezoso, por si lo queréis ver. Pero este post no va de Jeunet.
¿Por qué me he acordado de Foutasies? Pues porque el viernes pasado la Academia de las Artes y de las Ciencias Cinematográficas de España (¿os he dicho ya que me encanta decir entero este nombre?) hizo oficial la lista de Nominados a los Goya. Y a mí me han empezado a venir a la cabeza cosas que me gustan y cosas que no me gustan de esa lista. Igual que a Dominique Pinon, y no se crean que con una cara mucho más ortodoxa. Y así de paso, entronco con los dos últimos posts del blog (yo antes no hablaba así, os lo juro), que iban dedicados al Goya de Honor de este año, Jesús Franco.
Antes, eso sí, tal vez queráis echar un vistazo a la LISTA OFICIAL DE LOS CANDIDATOS A LOS GOYA. En fin, allá voy:
  • Me gusta Manuela Velasco, que fue quien leyó la lista de nominados con José Luis Torrijo, que también me gusta, pero en otra dimensión.
  • No me gusta cómo habla la presi Ángeles González Sinde, ni la chorrada ésa de eliminar este año la palabra “nominados” y sustituirla por “candidatos”, porque la primera es un anglicismo. También es un anglicismo “condemor”, y se usa en el cine español (este dato tengo que verificarlo). Además, justo este año la RAE ha aceptado la palabra “nominado” con el significado de “candidato”. Qué cosas.
  • Me gusta que Los girasoles ciegos tenga 15 nominaciones. No es la mejor película española de la historia (¿cuál es la mejor película española de la historia?), pero sí creo que es la mejor del  año. Me caen bien Cuerda, Javier Cámara y Raúl Arévalo, es increíble el trabajo de Maribel Verdú y adoro al desaparecido maestro Azcona (un día le di la mano y de los nervios casi se la disloco).
  • No me gusta que Los crímenes de Oxford tenga tantas nominaciones (6) . No entendí la película, como para entender que la nominen tanto.
  • No me gustó nada que Elijah Wood se comiera unos espaguetis con tomate sobre las perolas de Leonor Watling. Las perolas de Leonor Watling son sagradas, y Elijah Wood para mí siempre será un jodido gnomo, hombre. Sólo por eso deberían no nominar a Los crímenes de Oxford.
Leonor Watling a punto de permitir que Elijah Wood cree en mi mente una imagen erótica lamentable
  • Me gusta que nominen a Agustín Díaz Yanes porque me cae bien.
  • Pero no me gusta que Sólo quiero caminar tenga 11 nominaciones, porque si ésta es la segunda mejor película del año, mal vamos.
  • Me gusta que nominen mucho a Camino (7) por Javier Fesser Emilio Gavira, que es uno de mis amigos más grandes y porque así el Opus está nominado a algo bonito en su vida. Hay que tocarle los huevos al Opus de vez en cuando, que en esta vida no hay nada sagrado (y nunca mejor dicho), excepto las perolas de Leonor Watling.
  • No me gusta que Raphael tenga un especial en Nochebuena y que Josema Yuste y Florentino Fernández tengan otro en Navidad.
  • Me gusta que nominen como directores noveles a Nacho Vigalondo, porque es un cachondo, y a Belén Macías, proque es amiga de Javier Ocaña y los amigos de mis amigos digo yo que algo bueno tendrán.
  • Pero no me gusta que Los cronocrímenes y El patio de mi cárcel le estén quitando el puesto a otras buenas películas noveles, como El rey de la montaña o Aparecidos, que no figuran en la lista. Qué porra.
  • Me gusta que Retorno a Hansala tenga 3 nominaciones. Es una película sencilla, pequeña, solidaria y bonita.
  • Me gusta que Rafael Azcona opte al Goya al mejor guión adaptado. Lo siento por sus contrincantes, porque este año no tienen nada que hacer.
  • No me gusta que Sangre de mayo y La conjura de El Escorial sumen 12 nominaciones entre las dos, aunque la mayoría sean técnicas.
  • Me gusta que Alberto Iglesias opte al Goya por enésima vez. Es el mejor músico que tenemos, y además es el más majo. Los habrá quienes prefieran a Bebe, pero no es lo mismo.
  • Me gusta que ésté nominada 3 veces Mortadelo 2, pero otra vez porque sale Emilio Gavira. La película me pareció un horror, o casi.
  • No me gusta la lombarda, y mi madre la pone siempre en Nochebuena.
  • Me gusta que esté nominada Verónica Echegui. No creo que tenga mucho que hacer este año ante Maribel Verdú, pero es un pedazo de actriz con mucho futuro.
  • No me gusta el criterio de selección de los actores revelación. No lo entiendo. El año que lo ganó, José Ángel Egido me explicó que era porque, aunque ya era mayorcito, había abordado su primer papel de peso. Ana Wagener, gran actriz, está nominada este año, pero su papel en El patio de mi cárcel no me parece que tenga mucho más peso que los de, por ejemplo, El bola o Los años desnudos, creo. Me lo reexpliquen, por favor, que si no el año que viene voy a proponer a Fernando Chinarro para esta categoría.
  • Me gusta que cuatripita como nominada Elvira Mínguez, una actriz capaz de salir airosa del mayor desastre jamás filmado.
  • Porque no me gustó nada Cobardes. No es el mayor desastre jamás filmado, pero no me gustó nada.
  • Y me gusta mucho que haya vuelto la categoría de Mejor Película Europea. Y que este año no haya habido dudas ni polémica con los cortometrajes. Y escribir este blog. Y que lo leáis. Y los polvorones de toda la vida. Y los panchitos con cerveza antes de comer.

En fin, que esto es todo, que no es poco. Abrazos y felices fiestas, prosperidad, y paz y amor a los hombres y a las mujeres de buena voluntad, jou jou jou. Pero qué poco espíritu navideño tengo, Dios mío.