Hay tres cosas que me gustan mucho y que mis amigos dicen que no
me pegan: las películas de Leslie Nielsen (como demuestra el título
de este blog), los panchitos y El comisario. Lo de los panchitos no sé
por qué no me tiene que pegar. Y lo de El Comisario puedo comprenderlo, pero no
puedo evitarlo. Llevo enganchado a esta serie desde el año 2000 y desde
entonces creo que sólo me he perdido un capítulo porque no se me
grabó (y me perdí la primera temporada porque debía de estar yonqui perdido con
Gran
Hermano I, y eran demasiadas emociones para mí,
aunque no estoy muy seguro de que las fechas encajen).
Me gusta el personaje del Comisiario Castilla, porque
de lo increíblemente serio y formal que es, me lo creo totalmente (me pasa lo
mismo con el Inspector Jefe
Casqueiro). Cuando empezó la serie no me encajaba Tito Valverde de
madero, y seguía viendo al papá de Pepa
y Pepe y todo eso. Pero ahora no es que le identifique con un
poli, es que no me lo pongas en otro papel porque se me irá la pinza y sólo
veré al Comisario Castilla,
aunque haga de tranformista en una película de John Waters. Hace unos años, Tito Valverde
cenaba los viernes en el mismo restaurante de alta cocina oriental que yo
(bueno, en realidad era un chino de menú), y les contaba a sus hijos y a su
mujer, María Jesús Sirvent,
las escenas que había rodado esa semana. Mi novia y yo abandonábamos nuestras
habituales conversaciones sobre Ibsen y Unamuno y arrimábamos la oreja a la
mesa de Tito. Molaba enterarse de la trama antes que los demás. Ya no
cenamos en ese chino. Mierda.
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Charlie y Elo morreando. Qué fuerte. |
Me cae bien Pope, aunque desde que bebe no hay quien lo soporte, pero eso es
normal, también me pasó con Pajares. Bueno no, ya me pasaba
antes. Además qué digo, si no tengo ni idea de si Pajares bebe o qué es lo
que le pasa. No me cae bien su mujer Elo (su mujer de Pope, no de Pajares), que
es la que le ha arrastrado hasta el alcohol (a Pope). Ah, mala mujer, con lo
bueno que fue Pope contigo. Y es que me pone
nervioso, siempre sufriendo y siempre tan afectada y tal. Qué zorrilla. Me cae
bien Mikel, aunque no sé pronunciar ni
escribir bien el apellido del actor, Patxi Freytez, siempre añado alguna erre
donde no va. Pero qué importa eso. Me creo a Lucas, me encantaba Pascual (el siempre impagable Joaquín Climent), me gusta un nuevo
personaje que interpreta José Luis Torrijos, que tiene un Goya por La soledad. En El comisario hay tres Goyas que yo sepa:
José Luis, el propio Tito Valverde y Ruth Gabriel, que también es nueva y que
hace de policía gitana. Toma ya. Y sufrí cuando se cargaron a Osma y a Alonso (Paula Echevarría y Pilar
Punzano, sufrí sobre todo porque eran guapas), o cuando murió Chacón, el gran Francesc Orella. Porque en El Comisario, cuando alguien deja la serie… ¡zas! se lo cepillan. Como en la
Mafia.
Pero tengo un problema con Charlie, o sea con Juan José Artero, sobre todo en esta undécima (récord de España) temporada.
En esta undécima temporada, Charlie
ha intimado con la mujer de su amigo Pope
y se la está levantando (ya sé, la expresión “se la está levantando” no es muy
apropiada en este contexto, lo digo antes de que me afeen mi vocabulario mis
amigos Julio y Wolffo). Y claro, yo pienso: “Pope,
tío, o tú eres tonto o no viste Verano
azul“. Porque ahí radica mi problema: que mira que han pasado los
años, pero yo sigo viendo en Juanjo
Artero y en Charlie
a Javi, el rubio de
Verano azul.
Compréndanme, si es que en mi infancia y adolescencia llegué a ver esa serie
nueve veces. Si es que con mi amigo Enrique Catá soy la única persona de Europa
que me sé los títulos de todos los capítulos de la serie.
Y claro, a poco que Pope se hubiera fijado en Pancho, pues habría deducido
que Javi (Charlie)
iba a por su chica. Porque Elo
es como Bea y
los dos van a por ella. Ya se han pegado, como en ese capítulo en el que luego
recitaban “Ni que el viento la toque”. Cualquier día, ya veréis, Elo se hace mujer y tiene su
primera regla, Pope
se rompe una pierna y reparte leche en un burro y Charlie se desnuda en una
piscina y su padre le mete una hostia. Y al final no se quedará con Elo ninguno de los dos,
porque se morirá Chanquete
(que digo yo que aquí será Tito
Valverde) y se acabará la serie. Lo que no acabo de vislumbrar
es qué personaje me recuerda a Desi.
Gracias a Dios, añado.
Qué líos me hago. Pero cómo
me gusta El comisario.