miércoles, 8 de junio de 2011

“Nowhere boy” y otros cantantes de cine

Este post lo debería estar escribiendo el gran Fermín Zabalegui. Técnicamente quizá no del todo, porque voy a hablaros de cine, ya veréis, pero honestamente sí, porque también voy a hablar de música, y yo lo único que sé de música es que la quinta de Beethoven la escribió Mozart y que Parchís eran buenísimos.
La cosa es que ha llegado a los cines Nowhere boy, el biopic deJohn Lennon, que no es exactamente un biopic (me encanta esta palabra que viene de BIOgraphic PICture, es como NEO-CON, y WEB-CAM, yo mismo me voy a autodenominar JO-CLE). Es un youthpic, un adolespic, un primeraetapadeunavida-pic. No es la vida de Lennon, es su juventud, hasta que se formaron Los Beatles. Pero su estreno me ha hecho rebuscar en mi interior musical, y no he encontrado nada, y entonces he rebuscado en el interior musical de la historia del cine, y ya sí que me han salido más cosas. Y casi todas ellas eran las vida de verdaderos ídolos de la música, como Lennon.
El actor que interpreta a John Lennon de joven fumando. Qué subversivo, qué yeyé.
- Por ejemplo, al poco tiempo de diñarla Elvis Presley, John Carpenter rodó Elvis (1979), al que dio vida Kurt Russell. Era un telefilm para televisión que estuvo nominado a los Globos de Oro. Más tarde, en 2005, Jonathan Rhys Meyers ganó el Globo al mejor actor por otra miniserie sobre Elvis.
- Jerry Lee Lewis aún no la ha diñado, aunque yo le vi hace dos veranos en un concierto y lo pasé fatal porque parecía que iba a hacerlo ahí en medio, ante el público. Dennis Quaid lo interpretó en 1989 en Gran bola de fuego (qué mal suena en español y qué bien en inglés: “Great balls of fire!”). La película ahondaba en el escándalo de Jerry cuando se casó con una menor de 13 años que interpretaba Wynona Ryder y que robó todo el atrezzo de la película. O no, creo que aquí estoy mezclando datos.
- Jim Morrison tuvo su paso a la inmortalidad del celuloide en The Doors, de Oliver Stone (1991), aunque la inmortalidad ya se la tenía más que ganada. Oliver mostraba su paso (el de Jim) por las drogas, las alucinaciones y los excesos. Y como suele pasarle a Oliver, la película, a ratos, se convierte en eso a lo que los que sabemos de cine denominamos técnicamente como un coñazo.
- Tina Turner también tuvo su doble en la actriz Angela Bassett, que hasta estuvo nominada al Oscar y todo en 1993 por Tina y por aguantar  que Laurence Fishburne la pegara, bueno, no a ella, sino al personaje, o sea que el que la pegaba era Ike, no Laurence. Yo de pequeño vestía unas camisas que también se llamaban Ike, pero que no me pegaban nada.
Angela Bassett versus Tina Turner. Qué listos los directores de ´cásting al elegir a una actriz negra y no pintar por ejemplo a Kathy Bates.
- Ray Charles también le dejó un premio póstumo al actor que le interpretó (es queinterpretar a un cantante da muchos premios y nominaciones, póstumos y no). En este caso, Jamie Foxx se los llevó todos por Ray (Oscar, Globo, Bafta, etc.), y se ponía muy pesado cada vez que recibía uo y hacía cantar al público como si fuera Fofito. La película contaba el período más explosivo de su carrera, y su viaje desde Florida hasta Seattle, pero también contaba su infancia, por qué eligió ser cantante y ser ciego (bueno, creo que esto no se elige), etc.
- Johnny Cash, el hombre de negro, también le dio un Globo de Oro al actor que lo interpretó, Joaquin Phoenix, y un Oscar a Reesee Witherspoon, que hacía de su señora. En la cuerda floja nos contaba la relación de Johnny Cash con Elvis Presley, Carl Perkins, Roy Orbison o Jerry Lee Lewis, el mítico concierto que dieron en el 68, su éxito que le hizo vender más que Los Beatles, etc. Yo les habría pedido cameos Jonathan Rhys Meyers como Elvis y a Dennis Quaid como Jerry, y uno a Jim Carrey para despistar.
- Edith Piaf era fea, pero en La vida en rosa la interpretó Marion Cotillard, que yo no he visto una chica más guapa que ella en Midnight in Paris. También ganó el Oscar, yo creo que si un día Fernando Tejero interpreta a Loquillo, también le dan el Oscar. La película también estaba plagada de otras personalidades como Yves Montand, Jean Cocteau, Charles Aznavour, Marlene Dietrich, Marcel Cerdan, etc.
- A Bob Dylan le hicieron una película más rara en 2007 I’m not there (en algún momento de la proyección me habría gustado decir eso a mí). Lo interpretaron siete actores distintos, entre ellos Cate Blanchett (nominada al Oscar… en fin…). La idea no estaba mal, porque cada actor encarnaba un aspecto de la personalidad de Dylan, pero luego era un poco lío porque si de repente aparecía un actor gordo y negro tú ya no sabías si podía ser Dylan. Qué raro canta Bob Dylan, como sin ganas, ¿no?
- Control es una película menos conocida pero maravillosa sobre Ian Curtis, el líder de Joy Division que  se suicidó en 1980. Sus conflictos amorosos, sus ataques de epilepsia, sus problemas con las drogas y sus increíbles directos estaban contados con absoluta maestría por Anton Corbijn.
Y podría seguir con las vidas de Serge Gainsbourg (Gainsbourg, vida de un héroe), de  Billie Holiday (Lady sings the blues), de Buddy Holly (The Buddy Holly Story), de Little Richard (Ídem), de Las Supremes… hasta están rodando un biopic de la Pantoja con un actor gordote que hace de Paquirrín. Pero claro, eso no es lo mismo.