viernes, 15 de octubre de 2010

En el Festival de Sitges (2). “La otra hija”

Aprovechando mi corta estancia en el Festival de Sitges, y alargándola en la memoria como si la vida me fuera en ello, voy a hablaros hoy de una película que se estrena este viernes y que tiene dos peculiaridades, o tres. Tal vez cuatro. O cinco. Se llama La otra hija, y entre las cosas que la hacen diferente, destacan:
  • Que es una película de Kevin Costner.
  • Que la dirige un español: Luis Berdejo.
  • Que ese español no ha hecho ninguna película antes, porque procede directamente del corto, o sea que ha debutado dirigiendo a Kevin Costner. Mola.
  • Que la co-portagonista es Ivana Baquero, la niña de El laberinto del fauno. O sea, que ha debutado en EE.UU. haciendo de hija de Kevin Costner. Mola.
  • Que en EE.UU. la película sólo tuvo en preestrenillo en el cine y después pasó directamente al DVD. Eso no mola nada.
Ivana Baquero, que es la otra hija de Kevin Costner. ¿A que da mal rollo en la foto?
Bueno, y ahora vamos a explayarnos. La otra hija en inglés se llama The new daughter, un título mucho más acertado, porque la hija ya veréis que más que otra, es nueva. Es una historia de terror paranormal, con rituales religiosos, antropológicos y creo que fantasmagóricos. Cuenta la historia de un padre dovorciado que se traslada a una casa en las afueras del mundo con su hija adolescente (Ivana) y su hijo pequeño. A éste le mola la casa y a la niña no, y entonces va y se pone rebelde (dejavú). Pero de pronto, algo cambia en el comportamiento de la niña, y ese algo parece tener que ver con una especie de túmulo funerario que hay cerca de la casa y en el que parece que podrían descansar los restos de una antigua civilización india o algo así.
Cuando la veais, me explicáis por qué Kevin Costner no se lleva a los niños de esa casa y por qué no les insiste más a unos vecinos que parecen querer contarle la terrible historia de su casa.
Y dicho esto, no debería contar más cosas de la película para no despanzurrarla. Pero sí puedo deciros que tiene demasiados elementos que no me convencen: muchos más dejavús aparte del que os he citado, un argumento a veces poco sólido y otras algo forzado, y una pérdida demasiado temprana de la posible sutileza del miedo en favor de la evidencia. Con esta maravillosa última frase quiero decir que a mí me da mucho más cague el miedo sugerido que el mostrado, me da más miedo el mal que no veo que el monstruo perfecto, me provoca más pesadillas una pantera que no se ve filmada por Tourneur que un Godzilla digital creado por Emmerich. Y La otra hija acaba perdiendo lo primero y rindiéndose a lo segundo.
Hay que decir que Luis Berdejo dirige esta película por encargo. En la entrevista que nos concedió en SItges a los de CANAL+, al alimón con Ivana Baquero e inquiridos maravillosamente por Cristina Teva (y realizados por Carlitos, que es amigo de Berdejo), resumió esta situación así: “tú haces unos cortos, los mandas a EE.UU., alguien los ve, te encarga esta peli y tú aceptas”. Así de fácil y sencillo. Ivana es más elaborada en sus palabras, tiene 16 años pero habla como un catedrático de la lengua (española o inglesa, las maneja igual). Le preguntas qué tal el rodaje y te habla de los sindicatos en EE.UU. Le sacas el tema de Kevin Costner y te habla de compañerismo y generosidad. Luis se ríe más de sí mismo: nos contaba que la profesora de inglés de Ivana (bueno, allí se dice “coach”) llegó a prohibirle que hablara en inglés con Luis, porque le estropeaba el acento. Como decía Luis: “¿y cómo la dirijo? ¿mandándole emails?” Y que Kevin a veces no entendía las instrucciones del dire.
Y también hay que decir que si bien La otra hija no es la mejor película de terror de la Historia, tampoco se merece en absoluto pasar directamente al DVD. Yo puedo ver cada año 200 películas de terror y fantásticas peores que La otra hija, Bueno, esto es mentira: no veo al año 200 películas de terror ni de coña. Creo que no veo al año 200 películas de nada. En fin, el caso es que aquí sí que se estrena en los cines, este viernes, creo haberlo dicho ya…
Dejando de lado a La otra hija, y para cerrar este cepítulo tan así del Festival de Sitges, os comentaré que ha sido sencillamente un placer estar estos días por aquí, comer más arroces caldosos que la madre que parió al inventor de los arroces caldosos, pasar en el Hotel Meliá (la sede del Festival) más tiempo que la madre que parió al inventor del Hotel Meliá, encontrarme por sus jardines con la gente que lleva la prensa de las películas para poder atender a sus peticiones o no, y que indistintamente te traten con la misma sonrisa y cariño, y hablo de Sandra Ejarque, Ainoa Pernaute, Manel, Alberto Sestayo de Vértice, Nuria Costa, Piti, Laura Olaizola, etc… Gracias a todos ellos, y a mis padres, que me apoyaron en este proyecto, y muy especialmente al equipo que viajó conmigo y a mis hermanas, y a mi chica, y a mis gatetes. Mierda, ya se me ha ido la pinza y he pensado que me han dado al Goya al mejor director de sonido novel. Dispensadme.
Y también fue un placer charlar con el director del festival, Angel Sala, de lo divino y lo humano (bueno, sólo de lo humano); reencontrarme después de muchos años con el guionista, director y hombre orquesta Antonio Trashorras, cambiar impresiones con Jaume Figueras, comer con su equipo de TV3 y esquivar por los pasillos a Carlos Pumares, al que no conozco en persona pero esquivo por si acaso.
Mi compañera Patri (del progama "Mundo X") con Bruce LaBruce, que es el tío de las gafas de sol. El otro es mi compañero Carlitos García.
Y os dejo con esta foto que habéis visto de la entrevista que le hicimos a Bruce LaBruce, mítico director de cine porno gay, del que no tengo ni idea de qué contaros, pero para remediarlo me he empezado a bajar su filmografía del emule, por profesionalidad, curiosidad y rigor periodístico, pero he puesto en el buscador “Bruce + porno + gay” y me ha bajado una película casera de un efebo de New Jersey copulando con un doble cutre de Bruce Springsteen, “The boss”. Paciencia, ya me bajará algo digno.

Cómo es esto del emule, en cuanto buscas una cosa inocente para culturizarte, te baja algo de porno…