jueves, 14 de abril de 2011

La Academia y González Macho. Who is exactamente the winner?

Ahora que ya han pasado unos días desde que la Academia ha cambiado de Presidente… ahora que toda la prensa ha analizado ya a la terna de ganadores… ahora que ya hemos leído muchas entrevistas con las opiniones de la terna entrante… ahora que Álex de la Iglesia ya puede twittear a sus anchas (bueno, ya lo hacía)… tal vez sea el momento, cuando empieza la calma tras la tempestad, de no olvidarnos de este asunto y de pensar lo que puede significar la nueva línea por la que opta nuestra Academia. Y entender por qué ha sucedido. Y pensar en lo que pueda pasar.
1. No es tan importante quién presida la Academia. Se han oído muchas voces (las de “los internautas” ¿pero quiénes son los internautas, por qué yo no estoy en esas comisiones?). La Academia puede opinar y debatir, pero nunca decidir. Si la Ministra de Cultura impone la ley Sinde, da igual lo que diga la Academia (recordemos el affaire Álex). Si un nuevo ministro obliga a descargarse gratis las cosas, dará igual lo que opine González Macho. Que no dé miedo lo que diga la Academia: es la voz de los cineastas (académicos), pero no legisla.
2. Tampoco les preocupaba demasiado todo esto a los académicos, y eso que han sido las elecciones más mediáticas de su historia. Bigas Luna y Enrique González Macho presentaban opciones bastante diferentes, y sólo votaron un 38% de los 968 académicos, y eso que se podía hacer por correo. Enrique Gonzalez Macho ha ganado con 256 votos frente a los 101 de Bigas Luna. Álex ganó con 140.
Marta Etura, Enrique González macho y Judith Colell. Presi y Vicepresis.
3. La frase “El todo gratis no vale” de Macho fue un revuelo en Twitter. A ver, claro que no vale, no puede valer. Habrá que buscar una solución: Esponsorización? Abaratamiento? Publicidad? Fórmulas mixtas? Amigos, nadie hace nada gratis. No podemos exigir que la gente haga cine y que no ganen dinero. Otra cosa es de dónde tiene que salir ese dinero. Pero Enrique, tampoco hay que insultar, caramba… (“El que piense que en el futuro no va a tener que pagar por ver contenidos de calidad, es que es bobo”)
4. Pero tampoco nos volvamos locos y pensemos que porque González Macho sea exhibidor ya no va a haber descargas ni legales ni alegales. Marta Etura, la vicepresidente, dice: “Hay que ajustarse a los nuevos formatos, y sin duda lo haremos”. Y por ahí van los tiros.
5. “Internet es un debate, pero no el único. Para mi es mas importante el día a día. Va a haber debate de internet, pero la Academia son mas cosas”. También de acuerdo,. Pero el problema ahora mismo del cine español es que no se ve, que las que se quieren ver, se bajan, y que la idea del cine español es que “casi todo es malo”. El primer debate SÍ debe ser el de Internet. Y luego, a mejorar la idea que tenemos de nuestro cine (Marta Etura: “El punto fundamental es acercar el cine español a quien esta mas alejado de él”).
6. González Macho no tiene Twitter. Gerardo Herrero lo elogia, porque “así no dice lo primero que se le pasa por la cabeza”. Bueno, para presidir la Academia no hace falta Twitter. No debo enterarme yo de las cosas antes de Macho (esto suena super gay) antes que Marta Etura. Álex pecó un poco de eso.
7. “Lo importante es que te conozcan en el colectivo que te elige. La profesión, que son los que nos han votado”. Correcto, aunque no sea toda la profesión la que le ha votado, los académicos no son toda la profesión y del 38% de los académicos le han votado. Pero deben conocerle, aunque Enrique es ya muy conocido y respetado.
8. Enrique González Macho también criticó el doblaje como uno de los males del cine español. Pero eso tiene difícil solución. Cierto es que el nuevo Presidente es la persona que más ha hecho en España por el cine subtitulado (es el dueño de los Renoir y de los cines Princesa de Madrid), pero ahora, con las nuevas tecnologías y con el 3D, parece imposible luchar contra esos 40 años de doblaje obligatorio que dinamitaron en España cualquier opción de oír a los actores extranjeros con su propia voz. Pero me gusta que el Presidente piense así.
Y ya está. ¿A que tampoco os he explicado muy bien por dónde va a ir la Academia? Soy un desastre, lo sé…